DOS TESTIMONIOS DE LA 2DA GENERACIÓN DE ALAS

DOS TESTIMONIOS DE LA 2da GENERACIÓN DE ALAS

En tiempos de crisis, es difícil mantener la esperanza ante los problemas que surgen constantemente. Pero entre todo el embrollo global, y la particular dificultad que presenta nuestro país, surgen historias que inspiran a seguir, historias ejemplares donde la fortaleza de la juventud vuelve a demostrar que todo es posible. Por eso, a continuación, te compartimos, con total orgullo, un par de testimonios de nuestra 2da Generación de ALAS (Activando Líderes en Acción Social).

Ella es Evelin Nayeli Pedroza Guerrero, formó parte de la 2da Generación del programa de Fundación Vamos México ALAS. Se dedica de lleno al deporte y al estudio.

“En el año del 2018, viajé a Canadá. Visité la cuidad de Ottawa y la providencia de Quebec. Actualmente, estudio en la UTL (Universidad Tecnológica de León) donde curso el 4to cuatrimestre de TSU (Técnico Superior Universitario), en la carrera de Ing. Mecatrónica. Mi especialidad es Sistemas de Manufactura Flexible.

Formé parte de la selección femenil de fútbol 7 de la Universidad. En febrero de este año 2020, fui seleccionada para participar en el evento deportivo «Regional», siendo parte del equipo campeón. Obtuvimos pasé al Nacional, representando su Universidad y al bello Municipio de León, Gto.
Entreno de lunes a viernes. Mi profesor me envía de forma virtual la planeación, y ella da cumplimiento con evidencias de su entrenamiento.

También participo activamente en ligas de fútbol rurales de San Francisco del Rincón.”

Él es Nazario. Formó parte de la 2da Generación del programa de Fundación Vamos México ALAS.

Sería difícil definir la manera en que el programa ALAS cambio mi estilo de vida, debido a que son tantos aspectos en los que me ha impactado. Pero si me preguntaran cuales son los más relevantes, serían que te ayuda a comprender que más allá de tu comunidad y familia, que hay un mundo al que perteneces y en el que te vinculas con una infinidad de personas que, más allá de ayudarte a pasar barreras físicas, son grandes amigos, mentores y compañeros de grandes experiencias.

Por otro lado, está el estudiar. Uno pensaría que por venir de zonas rurales y marginadas no puede estudiar por lo difícil que es acceder a la educación, o simplemente porque creerías que el servicio no está en tu comunidad. Pero después de haber conocido otro país y, ¡aún mejor!, haber estudiado en UCSD (University of California San Diego), me di cuenta que los límites no existen, que esto genera sueños y los vuelve realidad. Los sueños son algo que desde niños aprendemos a temer, pero una vez viviendo la experiencia, todo cambia y las posibilidades se abren ante ti.

Para finalizar, solo quiero agregar que la familia es fundamental para todos. Se podría decir que en mi caso es el motor que mueve mis alas, y me lleva al destino que quiero, por más lejano que sea y por difícil que sea el camino, porque el objetivo no cambia.

Actualmente estoy estudiando la carrera de Ingeniería electromecánica en la Universidad De La Salle Bajío con una beca del 100%.”